Posverdad: desinformación y coste de las fake news

Elena Lozano Cobo

Este documental, recientemente publicado en la plataforma de HBO, es una jarra de agua fría frente a la realidad de las fake news. Muestra el alcance de estas a través de las redes sociales en un caldo de cultivo como es Estados Unidos; un país de 327 millones de habitantes, de los cuales 43 millones son analfabetos y un 68% se informa a través de redes sociales

Las fake news en el “país de la libertad” se han convertido en una nueva herramienta de propaganda hasta el punto de que se ha creado un contexto en el que la información se ha instrumentalizado como arma. Se establece un horizonte temporal en el que empezaron a ganar importancia las noticias falsas empezando en 2015 con la conspiración alrededor de Jade Helm (ejercicio militar en Texas en torno al cual se genera una teoría de conspiración que sostenía que era la primera parte de un plan de Obama para declarar la Ley Marcial y meter en campos de concentración a sus opositores).


 

El impulso de las fake news se ve favorecido de esta forma por las redes sociales, que facilitan la difusión de estas y que conforman la principal fuente de obtención de información para la mayoría de los estadounidenses; la posición de Trump, que distorsiona el concepto al catalogar a la prensa íntegra y fiable como fake news por el mero hecho de no ser partidarios suyos; y la aparente “necesidad” de igualar las condiciones de partida en las elecciones que sostiene el activista Matt Osborne (que se bastó de información falsa para llevar a cabo una campaña a favor de un candidato demócrata) y que lleva a un intento de “legitimación” de su uso.

El documental también explora la responsabilidad que tienen plataformas como Facebook que permiten la difusión de estas informaciones falsas. Cuestiona la aparente inocencia en la creación de la aplicación y la inacción ante el desarrollo de esta para fines completamente ilícitos, siendo muchas veces una herramienta de odio contra minorías y colectivos (LGTBI, judíos, población en contra de las armas, etc).

Sin duda nos encontramos con una escalofriante ventana a las entrañas de las fake news y la capacidad para llamar a la acción que tienen. Rescatamos una frase del documental que dice:

“Muchas de estas tecnologías son armas, y van a ser disparadas”.